El grupo islamista Hamás, que gobierna la Franja de Gaza, instó este viernes al Gobierno de Paraguay a reconsiderar su decisión de trasladar la embajada paraguaya en Israel a Jerusalén. En un comunicado, Hamás calificó esta medida como una “vulneración” de los derechos del pueblo palestino y una violación de las resoluciones de la ONU.
“Pedimos al Gobierno paraguayo revertir esta decisión, y ponerse del lado de los valores de humanidad, justicia y legalidad, y apoyar a nuestro pueblo oprimido”, expresó el grupo. Asimismo, señaló que este traslado refuerza la ocupación israelí sobre Jerusalén Este, reconocido por Naciones Unidas como territorio palestino ocupado desde 1967.
La embajada paraguaya fue reinaugurada el jueves por el presidente Santiago Peña, en un acto oficial que contó con la participación del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y ministros de ambos países. Durante la ceremonia, Peña afirmó: “Creemos, y esto es parte de la fe, que la capital del pueblo judío es Jerusalén desde hace 3.000 años”.
Este cambio en la política exterior paraguaya revive una controversia previa. En 2018, el entonces presidente Horacio Cartes trasladó la embajada a Jerusalén, siguiendo el ejemplo de Estados Unidos. Sin embargo, meses después, Mario Abdo Benítez, su sucesor, revirtió la decisión para mantener una posición neutral en el conflicto palestino-israelí.
Actualmente, solo seis países mantienen sus embajadas en Jerusalén: Estados Unidos, Guatemala, Honduras, Kosovo, Papúa Nueva Guinea y Paraguay. La mayoría de las naciones opta por Tel Aviv, respetando el consenso internacional que considera el estatus de Jerusalén un asunto pendiente de resolución.
La decisión paraguaya ha generado críticas y pedidos de revisión, subrayando la sensibilidad y las implicancias geopolíticas del conflicto en Oriente Medio.